Agradecidos en Todo Tiempo
En los días tan acelerados que vivimos con mucha frecuencia olvidamos los detalles mas pequeños, que la mayoría del tiempo son las cosas que mas deberían importar en nuestras vidas. Perdemos de vista la hermosura del cielo, el esplendor de la luna, la cálida brisa, los rayos del sol, un arco en las nubes, las montañas y su verdor. Pasamos por alto las conversaciones amenas y la gente a nuestro alrededor. No vemos al que necesita y así perdemos de vista que quien necesita soy yo. En una vida tan desenfrenada es imposible ver quien soy, ¿cómo es posible entonces ver la multitud de bendiciones que el Dios de misericordia me regaló?
Es entonces que debemos pausar, es entonces que debemos detenernos y meditar en las innumerables maravillas que el Señor, por Su Gracia, nos regaló. Es muy importante el poder identificar cuando nos encontramos viviendo a una velocidad en la cual no podemos percibir lo que sucede a nuestro alrededor… mucho menos en el dia de vida que Dios nos regaló. Es en esos momentos que debemos detenernos y buscar la guía del Señor. Nadie mejor a quien acudir que el Dios de misericordias quien sabe cuales son nuestras necesidades mas apremiantes primero que yo.
Cuando podemos apreciar y AGRADECER cuan grande es Su Amor por nosotros, Su Misericordia y Su Gracia… entonces podemos comprender la importancia de vivir un día a la vez, deteniéndonos a ver Su grandeza y Su poder. El mismo Señor Jesús, podríamos decir, en la enseñanza mas completa que encontramos en la escritura (El Sermón del Monte Mt.5-7), nos muestra cuales son las cosas mas importantes en nuestra vida y como Dios las suplirá. Pero también nos enseña que para poder percibir, recibir y disfrutar de estas bendiciones, debemos vivir un día a la vez… pues cada dia traerá su propio mal, sus propios problemas.
Mateo 6:34 NBLA
“Por tanto, no se preocupen por el día de mañana; porque el día de mañana se cuidará de sí mismo. Bástenle a cada día sus propios problemas”
Con mucha frecuencia llegamos al final de un dia o de una semana y no nos damos cuenta de que solo lo superamos gracias a la fuerza y la Gracia de Dios. El afán nos lleva al estrés, los desafíos nos nublan el entendimiento, los altibajos nos hacen decaer… sin embargo, pasamos por alto que Él estuvo ahí en todo. Incluso cuando no nos dábamos cuenta, cuando pensamos que lo estábamos haciendo nosotros mismos, era Él quien guiaba nuestros pasos, nos daba descanso y nos llenaba con lo justo para seguir adelante, hacia un nuevo amanecer. Así que, antes de apresurarnos a lo siguiente, antes de salir de la cama a toda prisa, antes de salir al trabajo o la escuela con el desenfreno diario… tomémonos un momento para decir simplemente: "Gracias, Dios". Derrama tu corazón a Dios en Acción de Gracias TODOS LOS DIAS porque El nos sostiene, porque El nos guarda, porque El es siempre fiel, por Su Gracia, por Su Misericordia y porque El nunca nos suelta.
Aprendamos a ser Agradecidos a Dios en Todo Tiempo!!!
"Den gracias al Señor, porque él es bueno; su amor perdura para siempre".
Salmo 107:1
En la Presencia del Señor
Coram Deo, el Devocional